¡Jubilación!

Diario Las Americas
Publicado el 05-25-2011

Mario Vargas Llosa, FIU in View, Uva de Aragón

Uva de Aragón entrevista a Mario Vargas Llosa para un programa de FIU, Miami 1991

Nunca olvidaré la mañana del 12 de enero de 1987 cuando comencé a trabajar en la Universidad Internacional de la Florida (FIU). Al subir las escaleras de Primera Casa le pedí a Dios que pudiera desarrollar allí mi carrera y encontrar un segundo hogar. Me escuchó. Casi 25 años después, tras unos pocos años en el Departamento de Prensa, uno en la Oficina del Presidente, y casi 17 como subdirectora del Instituto de Investigaciones Cubanas (CRI), me jubilo. En vez de retirarme, prefiero decir jubilarme – que viene de júbilo, y del latín, “jubilare”, gritar de alegría— pues me ilusiona que podré dedicar más tiempos a escribir y a otros proyectos que me mantendrán bien activa.

Durante este cuarto de siglo he tenido la oportunidad de aprender y crecer profesionalmente; de trabajar con colegas entrañables; de influir, siquiera de forma modesta, en algunos de mis estudiantes; y también, de aprender de ellos. He tenido el apoyo de administradores eficientes y corteses. Sin duda mis años en el CRI han sido los mejores de los 51 años que llevo trabajando, porque me han permitido ampliar mis propios conocimientos sobre Cuba y promover actividades académicas y culturales sobre mi país. También durante mis primeros años en el CRI conocí a muchos colegas de la Isla que me llevaron a darme cuenta de las muchas cosas que nos unían, pese a que no pensáramos igual en todo y tuviéramos vivencias muy diferentes. Ello me ayudó a decidir a volver a Cuba en 1999 –de donde salí en 1959– y a regresar varias veces más. Estos viajes han sido para mí de un valor incalculable por múltiples razones, entre ellas, por el reencuentro con familiares que no había visto en décadas y por las amistades que fui creando, y aún perduran, con colegas, escritores y muchas otras personas.

En FIU he conocido a personalidades de relieve como Barry Goldwater; los presidentes Jimmy Carter y George H.W. Bush; el Presidente de Costa Rica Oscar Arias; los escritores Camilo José Cela y Carlos Fuentes; y muchas otras. En distintas oportunidades tuve la satisfacción de acompañar a cubanos destacados, lamentablemente ya desaparecidos –Leví Marrero, Eugenio Florit, Celia Cruz, Guillermo Cabrera Infante— al conferírseles el grado de “doctor honoris causa”. Algunas personalidades, como Mario Vargas Llosa, aceptaron venir a FIU por mediación mía, lo que me permitió durante un semestre disfrutar muchos ratos agradables con él y su esposa Patricia.

Especialmente a principios de los años 90, la labor del CRI fue objeto de polémicas, acusaciones, y hasta amenazas. Sin embargo, el Instituto disfruta hoy de gran prestigio y respeto, y me siento orgullosa de haber contribuido a sus muchos logros. Durante estos 25 años ha habido también sinsabores. Siempre en la vida nos tropezamos con algún jefe injusto, algún colega envidioso, algún estudiante díscolo. Fueron la excepción. Han sido muchos más los buenos momentos que los malos.

En estos días, limpiando mi oficina, donde prácticamente he “vivido” casi 17 años, me encontré con infinidad de cartas, noticas, fotos, papeles, evaluaciones de estudiantes, que me trajeron muchos recuerdos y me han hecho darme cuenta de la inmensidad de la labor realizada. Me voy con gran satisfacción por lo que he podido hacer en FIU, y de cómo he visto a la comunidad de Miami, sin ceder en sus principios esenciales, tornarse más tolerante.

Por el camino, claro está, la vida pasa. Tenía 43 años cuando comencé a trabajar en FIU y estoy ahora en el umbral de los 67. Terminé mi doctorado en 1991. Ha habido amor y desamor, han muerto mis padres y hermanos mayores, y nacido y crecido mis cuatro nietos. He publicado media docena de libros, que se han presentado a salón lleno en FIU. Tengo más libras encima y en vez de la negra cabellera de antaño, ahora el tinte y los rayitos cubren mis canas. Evito las escaleras de Primera Casa porque me duelen las rodillas, señal inequívoca de que es buen momento para jubilarse.

También FIU ha crecido inmensamente en estos años. He visto construirse cada uno de los nuevos edificios, y he sido testigo de las luchas para abrir las escuelas de Leyes y Medicina. El mundo ha cambiado por igual. No se escriben ya cartas sino correos electrónicos, y todo lo que uno dice públicamente aparece de pronto en You Tube. Los “laptops” son tan imprescindibles para los estudiantes como ayer lo eran las carpetas y plumas. Presiento que en unos cinco años ya no habrá más libros de textos, sino que se estudiará en “IPads” y “Kindles”.

A medida que se acercan mis últimos días en FIU, no puedo dejar de sentir cierta nostalgia. El recinto se ve de otra forma con los ojos del adiós. Sin embargo, como la vida es un ciclo, pocas semanas después de marcharme, comenzará a estudiar en FIU mi nieto mayor. Importante razón para seguir vinculada a la universidad y al tanto de sus nuevos logros.

Tal como hice cuando comencé a trabajar en FIU, ahora le pido a Dios que me dé salud a fin de cumplir con los muchos proyectos que tengo para mis años de jubilación. Comienzo esta nueva etapa de mi vida con la ilusión de que sean útiles y felices, con más tiempo para mi familia, los amigos y la obra literaria. Y también– ¿por qué no? – para disfrutar de eso que ya en la antigüedad los griegos utilizaron con sensatez y júbilo: el ocio

Acerca de uvadearagon

escritora cubana
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12 respuestas a ¡Jubilación!

  1. teresa dijo:

    Un abrazo Uvita, que disfrutes del ocio creativo, con el vendrán nuevos impulsos, nuevos libros y aquella obra de teatro que me prometiste. Siempre, T.

  2. Cristobal Diaz Ayala dijo:

    Querida sobrina: Hermoso, como todo lo que escribes, poniendo siempre el corazón. Cristóbal.

  3. Querida Uva:
    Creo que es una nueva etapa que vas a disfrutar muchísimo. Y me muero por leer tu próximo libro y los siguientes que vendrán luego.

  4. Laura Garcia Freyre dijo:

    Uva, recuerdo que yo llegue a esa oficina de la que hoy te despides, buscando tu apoyo y ayuda cuando fui a hacer estudios a FIU y encontre una amiga. Gracias por todo. Hoy te deseo lo mejor, que disfrutes los años de ocio, llena de nietos y libros

    Un gran abrazo, Laura

  5. Victor Uribe dijo:

    Queridisima Uva,
    Aunque espero verte al menos de vez en cuando, extrañare la menor frecuencia de nuestros saludos pasajeros pero sustanciosos en las escaleras, los pasillos y los ascensores del DM. Extrañare tu calidad humana y tus historias. Envidio (sanamente) tu muy merecido «júbilo» y el ocio que se avecina. Te deseo, como siempre, lo mejor de la vida. Victor

  6. Lourdes Geller dijo:

    Querida Uvita:
    Se muy bien la nostalgia que da cuando un capitulo de la vida termina pero que contenta te tienes que sentir de mirar hacia atras y ver con orgullo tu grandiosa obra que dejas en FIU que no solo ha puesto muy alto tu nombre pero de paso el de los cubanos del exilio. Disfruta tus tiempos libres, tu familia y regocijate en tus muchos logros…..no muchos llegan tan lejos! Te quiero y admiro siempre y por una vida entera…tu amiga de la ninez,
    Lourdes

  7. María Ayub dijo:

    Querida Uva:

    Usted a sido una persona clave en mis estudios en FIU. Nunca olvidaré el día que pasé por su oficina para conocerla y en ese instante usted ya tenía en sus manos el anuncio para la clase del CRI-Humanidades en Cuba. Esa clase fué una experiencia maravillosa por sus temas y la dicha de poder ir de regreso a Cuba por primera vez después de haber salido de la isla en el 1962.

    El viaje con un grupo académico fue muy importante para mí porque era ver y asimilar por experiencia propia lo que es Cuba hoy en día. Una isla que sigue siendo interesante por su historia, la manera de ser del cubano y el desarrollo cultural que ha podido seguir adelante a pesar de todo tipo de polémicas y restricciones. Queda mucho por hacer, pero su entusiasmo y amor por la isla quedará siempre muy marcado en mi pensamiento sobre el país donde nací y donde todavía no tenemos libertad asegurada de viajar, tanto los cubanos como los americanos.

    Espero que su jubilación le traiga la tranquilidad que necesita para escribir mucho más y para poderla ver en los eventos del CRI como invitada y no como coordinadora. Que sus días de ocio sean realmente oportunos para sentirse todavía más cubana, más creativa y mas que nada feliz, sabiendo que su carrera profesional ha sido exitosa.

    un fuerte abrazo,
    María

  8. Angélica Cazarín dijo:

    Querida Uva
    Coincido contigo en que este momento de tu vida es para gritar de alegría, porque lograste una meta más de las muchas que te esperan en el porvenir. Tú recompensa más allá de los excelentes resultados, se encuentra en el esfuerzo de tantos años, un esfuerzo que se traduce en una victoria. Hoy comienza para tí otro proyecto, el del corazón.

  9. Armando R. Carvallo dijo:

    Uva, bien merecida tienes esta «jubilosa» jubilación. Todos te deseamos que disfrutes del ocio que te prometes, pero estoy seguro que vas a dejar a los griegos de la palabrita con las ganas… pues en «ocio» es en lo que menos vas a dedicar el tiempo. No importa, lo que importa es que a partir de ahora podrás hacer lo que quieras y cuando lo quieras… y eso vale mucho. MUCHAS FELICIDADES… y sigue deleitándonos con tus columnas y libros… ¡cuando te dé la gana!

  10. Guillermo J. Grenier dijo:

    Se te quiere!

  11. Iraida Lopez dijo:

    Querida Uva:
    Muchas felicitaciones por la jubilación y mis mejores deseos para la próxima etapa. Sé de primera mano que dejas muy buenos recuerdos entre los de allá. Acabo de echarte al correo una nota de Fina García Marruz, cortesía de Ana Cairo.
    Cariños,
    Iraida

    • uvadearagon dijo:

      Mil gracias por tu recadu y servicios de mensajera, Ya recibí la carta de Fina García Marruz, que me ha alegrado mucho por su cariñoso recuerdo de mi abuelo y tía Sara. Un abrazo para ti.

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